"No hay diferencia entre este mundo y los días del Mashiaj, más que la sumisión a los poderes extranjeros" (Talmud Berajot 34 B). Esto es, el pueblo judío vivirá en paz y libertad y no lo gobernará otra nación. Maimónides se hace eco de Shmuel: "No presumas que en los días del Mashiaj cambiará la naturaleza del mundo, o que habrá innovaciones en la obra de la Creación.Más bien, el mundo continuará de acuerdo con su esquema.Por lo tanto, él entiende "el león morará con el cordero" solo figurativamente, porque el pueblo judío, comparado con el cordero, vivirá en paz con los gentiles malvados semejantes al lobo. Como concluye: "De modo similar, otras profecías mesiánicas de esta naturaleza son metáforas.En los días del Mashiaj, cada uno advertirá a que cuestiones se aludía en estos versículos. En "Igueret Tejiat HaMetim" (cap. 5), Maimónides explica que esta profecía la toma como metáfora a fin de evitar el análisis acerca de milagros y cambios drásticos en la naturaleza. No obstante él declara estar "indeciso" y no "afirma categóricamente" que estas profecías deben entenderse como una metáfora. Muchos párrafos del Talmud indican que en los días del Mashiaj el mundo físico cambiará. Por ejemplo "en el tiempo por venir, todos los árboles silvestres de la tierra de Israel darán frutos" (Ketubot 112b).Y el Raavad en sus objeciones a Maimónides trae un versículo de la Torá misma para refutarlo: "Yo librare a la tierra de animales peligrosos" (Vaikra 26-6), lo que implica un cambio en la naturaleza.También Najmanides apoya esta idea no metafórica aunque sostiene que de todas maneras no sera un gran cambio en la Creación pues en la previa del pecado de Adam los animales no eran predadores.
