parte de una misma entidad. Por lo tanto, es sorprendente que la Torá ordene al pueblo judío a traer el aceite puro virgen utilizado para encender la menorá a Moisés, cuando Aarón era de hecho el Cohen Gadol en ese momento. Luego la Torá continúa comentando que el aceite debe ser traído a Moisés para encender “una luz constante” y después debe ser entregado a Aaron para encender “desde la noche hasta la mañana”. ¿Que ocurre? El trabajo de Aarón es habilitar a cada persona, sin importar las circunstancias, a reconocer su propósito espiritual interior y por lo tanto, alcanzar el potencial para el descubrimiento espiritual inherente en cada uno de nosotros. Este tipo de viaje nunca es consistente, a veces implica apreciar la belleza que tenemos y a veces significa dar batalla contra nuestros demonios interiores metafóricamente, noche y día. Moisés, por su lado, es el maestro y el profeta que trae la sabiduría de Di-s, enseñanzas que son perfectas y luminosas bajo todas las circunstancias, proporcionándoles una fuente constante de luz y guía. Los cimientos de cada uno de nuestros caminos individuales hacia el auto-descubrimiento espiritual están arraigados en la sabiduría y valores que son eternos y que trascienden las circunstancias cambiantes y las modas. Es por eso que el aceite, aquel que serviría como fuente de iluminación para los siete brazos individuales de la menorá, es entregado primero a Moisés quien proporciona el cimiento sobre el cual está basado todo el crecimiento espiritual.
Colabora con la difusión de Mashíaj y dona a través de PayPal al usuario vienemashiaj@gmail.com